¿Qué es y cómo prevenir la sarcopenia?

La sarcopenia es una enfermedad que ataca el músculo esquelético y que se caracteriza por la pérdida de masa muscular, llevando a una reducción de la fuerza muscular y eventualmente del propio rendimiento físico del paciente.

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Este padecimiento, de carácter progresivo, recibe su nombre en 1989 gracias a Irwin Rosenberg, quien acuñó el término para designarlo.

La aparición de la sarcopenia está vinculada con el avance de la edad, siendo un padecimiento general, pero que puede aparecer prematuramente o verse agudizado por otras circunstancias fuera del envejecimiento propio del individuo.

Esta enfermedad, especialmente cuando es acelerada por la inactividad física prolongada, estilo de vida sedentario o problemas de salud a nivel nutricional, aumenta el riesgo de caídas y fracturas, ya que la persona que la padece suele tener menos fuerza para sostenerse en pie.

Para evitar que la sarcopenia avance a un ritmo acelerado y que pueda afectarnos de una manera importante existen dos recomendaciones:

Mantener una dieta balanceada, con un alto contenido de calorías y  proteínas. En algunos casos se prescribe la inclusión de suplementos proteicos en la dieta del paciente para compensar cualquier falla posible. Practicar ejercicio con frecuencia. La actividad física ayuda a mantener una musculatura fuerte. Se ha comprobado que los ejercicios que incluyen pesas, bandas elásticas o que dependen del propio peso corporal, a saber, ejercicios de resistencia, son los más efectivos para mantener limitados los efectos de la sarcopenia.

Ya sabes, si no quieres sufrir de debilidad muscular prematura y deseas mantener tu cuerpo sano, una alimentación adecuada y el ejercicio son la mejor vía para garantizarlo.