Conoce más sobre la trayectoria del 'Zambo' Cavero

Arturo Cavero nos regaló canciones que trascenderán de generación en generación. Conoce aquí un poco más de la enorme trayectoria de uno de los músicos peruanos más grandes de todos los tiempos.

Aquel que no haya escuchado ‘Contigo Perú’ quizá es porque no sea peruano, porque los más de 30 millones que existimos nacimos y vivimos con esta canción. Se trata de una obra de arte de Arturo Cavero, uno de los cantantes de música criolla más grande de la historia. Para recordar un poco más a la leyenda, te contaremos sobre su trayectoria. Atención.

El ícono nació en Lima el 29 de noviembre de 1940. El ‘Zambo’ Cavero demostró que tenía talento para la música a los 16 años. Los primeros instrumentos que aprendió a tocar fueron de percusión. Así conoció a uno de los amores de su vida: el cajón. 

-> ESCUCHA LA MEJOR MÚSICA DEL RECUERDO, LAS 24 HORAS, AQUÍ  

Su época dorada fue en los años setenta. Se unió a ‘La Primera Guitarra Peruana’ Óscar Avilés y juntos consiguieron el éxito. Ambos tocaban canciones compuestas por Augusto Polo Campos. La manera como cantaba Cavero era única. Sus fans decían que la emoción que les hacía sentir era inexplicable. Tenía un ritmo tradicional y sabor netamente peruano.

Su tema ‘Contigo Perú’ fue considerado como el segundo himno del país durante el Mundial de Fútbol de 1982. Su éxito traspasó las fronteras. El 3 de junio de 1987 fue galardonado en Washington D.C. por la Organización de los Estados Americanos en honor a su contribución a la música. 

En una de sus últimas entrevistas, Cavero anunció que aprendió sus primeras canciones por su madre. “Ella cantaba. La primera canción que escuché fue Alma Mía, de Pedro Miguel Arrese. Eso fue lo primero que escuché a mi mamá, y por eso lo canto a cada momento”, dijo. También contó una anécdota con su fiel compañero guitarrista. “A mí se me salió el corazón cuando con Óscar cantamos en el Estadio Nacional, antes del partido con Argentina. Te crece el alma cuando estás ante 50 mil personas”. 

En octubre del 2009 Arturo sufrió una septicemia a causa de la obesidad que padecía. Ingresó a la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Rebagliati, lugar donde tendría sus últimos momentos en vida. La historia de Arturo ‘El Zambo’ Cavero jamás llegará a su final. Las personas mueren cuando dejan de recordarlas, y él nunca será olvidado.